ECONOMÍA Y NORMATIVA
Recientemente se celebró en Huesca la Jornada ADEA (Asociación Directivos y Ejecutivos de Aragón), contando con la participación de ponentes que expusieron temas muy interesantes. El tema expuesto por Carlos Bistuer Pardina, empresario y dirigente, que aludió a la extensa normativa que tiene que soportar y cumplimentar entre otros, el mundo empresarial, me ha servido de ¨inspiración¨ para este artículo.
La extensa producción y en muchos casos superposición de disposiciones y normas en los distintos niveles, europeos, estatales, autonómicos y locales, genera un entramado legislativo, que hace muy dificil la actividad de ciudadanos y empresarios. Este complejo enredo burocrático y administrativo supone una traba para el desarrollo económico, empresarial y por consecuencia en la generación de empleo y bienestar.
Normativas legales, laborales, fiscales, contables, financieras, medio ambientales…regulación, reglamentos, licencias, permisos, auditorías, inspecciones, más inspecciones, controles, más controles, requerimientos, sanciones, multas...son conceptos (y aplicación de recursos), con los que tiene que vivir la empresa a diario.
A nivel general, en España existen en vigor más de 100.000 leyes y normas de todo tipo, de las cuales 67.000 son de carácter autonómico. Si lo trasladamos a número de páginas, representa que se necesita para su registro más de un 1 millón de páginas. Y creciendo…Me llama la atención que en Alemania, sólo necesitan 5.000 páginas.
Según el informe ¨Producción normativa¨ de CEOE (Confederación Española de Organizaciones Empresariales), en el ejercicio 2021, a nivel de Europa, se aprobaron 2.176 leyes, normas y reglamentos. En España se aprobaron 851 nuevas normas de distinto rango a nivel estatal. Resalto que el año con menos leyes creadas fue el 2016, que ¨sólo¨ se elaboraron 436. Y de nuevo me llama la atención Alemania, donde la producción de leyes y normas es 10 veces menor que en España.
A considerar la producción de las Comunidades Autónomas, que aprobaron 348 leyes y normas, utilizando un total de 846.446 páginas para registrar sus publicaciones. Se puede observar el afán productivo normativo de las CC.AA. al comprobar que, en el 2010 utilizaron 690.000 páginas. En Aragón, se aprobaron 19 leyes.
Según el citado informe, se cifra en 45.000 millones el coste de la confección de semejante ¨entramado legislativo¨. Y aunque no todas las normas afectan a las empresas, se puede concluir que tanta ley regulatoria hace que los negocios se paren y algunos se ¨ahoguen¨ con tanta traba burocrática, produciendo un impacto negativo en la evolución, innovación y productividad de las empresas. ¡Dichoso papeleo!
Según informe elaborado por ¨World Justice Projet¨, en el apartado el ¨imperio de la ley¨ España ocupa el puesto 21, de 139 países analizados. España tiene que ver los países que están por encima, que sin dudar son países más competitivos al generar menos leyes, normas y trabas legislativas.
El Consejo General de Colegios de Economistas, lleva tiempo ¨predicando en el desierto¨ alertando sobre la ¨creciente hipertrofia legislativa¨ y sobre la ¨exagerada reglamentación¨ que sufre nuestra nación, y sobre todo a nivel autonómico. Al respecto pregunto ¿Funciona la Ley de Unidad de Mercado? Ley que pretendía evitar que los empresarios necesiten una licencia en cada Comunidad Autónoma para poder operar con el mismo producto o servicio en todo el territorio nacional. Sin dudar afecta a la unidad de mercado y a la seguridad jurídica.
He mencionado anteriormente el coste y la aplicación de recursos que las empresas y ciudadanos tienen que sufragar para hacer frente a tanta normativa administrativa y legislativa. Pues…hasta la propia Comisión Europea, en su documento ¨Legislar mejor para potenciar el crecimiento y el empleo¨, estima que los beneficios económicos que se derivaría de la reducción/eliminación de muchas de las cargas administrativas y normativas, repercutirían en un incremento de PIB europeo del 1,5%. Algún informe determina que en España, el incremento podría llegar al 3%.
Termino con unas reflexiones. ¿Incide la política en la economía? ¿Tanta proliferación de leyes, provoca seguridad o inseguridad jurídica? ¿Todos los empresarios y ciudadanos somos unos delincuentes? ¿Las inspecciones, deberían ser pedagógicas o recaudatorias? ¿Y las multas? ¿Es ético que los inspectores cobren incentivos? ¿Tienen más poder los técnicos municipales que los políticos? ¿Una de las causas de tanta normativa es para salvar la responsabilidad de los políticos y de los técnicos? ¿Regular para vivir o para morir? ¿Qué opinan? En mi opinión las AA.PP. deben ser ¨facilitadoras y no obstruccionistas¨. ¿Solución? ¡eso es otra historia!