sábado, 18 de marzo de 2023

Economía sostenible

 


ECONOMÍA SOSTENIBLE 

¿Qué se entiende por sostenibilidad? En mi opinión la sostenibilidad, es un principio y concepto de garantizar las necesidades presentes, sin comprometer y procurando asegurar las necesidades futuras. Es un concepto de moda, con uso en diversos aspectos de la vida, desde el medio ambiente, al tema climático, pasando por el desarrollo social… y hasta el crecimiento económico.

Aludir al desarrollo social y al crecimiento económico, junto con otros aspectos, es poner el foco en la economía sostenible. En consecuencia, podemos definir cómo Economía Sostenible, a la capacidad de organizar y administrar los recursos económicos presentes, generando la rentabilidad suficiente para garantizar los recursos económicos a medio y largo plazo.

Por supuesto, esta gestión de recursos debe ser de forma responsable y sin renunciar a la protección del medioambiente, al crecimiento económico y al desarrollo social. Las emergencias y crisis, obliga tanto a las empresas a replantearse los propósitos de producción, como a los consumidores sus hábitos de compra y forma de vida. La economía lineal, debe tender hacia una economía circular e inclusiva.

Sobre la Economía Circular, ya escribí un artículo en abril del 2017. Y decía: Nueva forma de entender la economía. De la economía lineal a la economía circular. Del “hacer-usar-tirar” a “de la cuna a la cuna” o de “recursos-productos-residuos” a “recursos-productos-recursos reciclados”. Este modelo propone, que la economía lineal evolucione hacia una circular y regenerativa, principalmente por el agotamiento de los recursos, y por un mundo más sostenible. 

La esencia de la economía circular se basa en diseñar y fabricar productos que no generen desechos, que faciliten su desmontaje y su reutilización. El principio básico de este modelo aplica la regla reutilizar, reparar, reducir y reciclar en un círculo continuo. Destacar, que el gobierno de Aragón ha constituido Aragón Circular, que, bajo la excelente dirección de Miguel Luis Lapeña, está promoviendo la implantación de esta modalidad económica, alineada con los ODS (Objetivos de Desarrollo Sostenible).

Mi amigo Ignacio Almudevar, es un convencido, defensor y ¨apóstol¨, de que en toda actividad económica, en el mundo empresarial, en cualquier comunidad, en cualquier entorno, deben estar conectadas las tres formas de sostenibilidad, la ambiental, la económica y la social. Una empresa que no cumple estos tres principios, no tiene ni presente ni futuro. Personalmente, considero muy desacertado criticar a los empresarios en general porque su objetivo sea obtener beneficios. Una empresa sin beneficios y sin crédito, está muerta. La generación de beneficios la hace sostenible. 

Considero mencionar a otro amigo, a Luis. El profesor Luis Ferruz, es un enamorado de muchas facetas de la vida, una de ellas la Bioeconomía o Economía Ecológica. Nuevo modelo productivo, así como nuevo modelo de economía de la financiación. Ambos modelos, necesitan de una profunda transformación. El motivo y razón es la necesidad y obligación de un desarrollo sostenible, y el respeto al medio ambiente, cada vez más degradado, al entender que los recursos que tenemos a nuestra disposición son prestados, y que debemos ponerlos a disposición de la nueva generación como mínimo en el estado actual.

Siguiendo con sus enseñanzas, y las directrices de la organización FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación), ante la cantidad de problemas económicos y medioambientales actuales, la bioeconomía busca soluciones relacionadas con diversos ámbitos, entre otros:

  • Administrar de manera sostenible los recursos naturales
  • Impulsar las energías renovables
  • Gestionar la seguridad alimentaria garantizando una mejor salud pública
  • Reducir el estrés hídrico
  • Creación de empleo verde, en su caso también con fijación de población o luchando a favor de la repoblación
  • Reducir emisiones de los gases de efecto invernadero.

No puede olvidarme de los emprendedores sostenibles. Emprendedores, con proyectos y empresas que nacen con el propósito y modelos de negocio basados en la sostenibilidad. A los aspectos clásicos del emprendimiento, se le añaden las nuevas tendencias de los modelos de negocio innovadores e inclusivos y centrados en los tres valores de la sostenibilidad: económico, social y ambiental. Destacan proyectos en economía del bien común, proyectos de economía social o de economía verde. De nuevo tengo que referirme a los ODS (Objetivos de Desarrollo Sostenible). Los emprendedores sostenibles están centrados y alineados con los ODS.

Dudo si es muy ortodoxo, referirse a uno mismo, pero… en diciembre del 2022, en el artículo ¨Economía y normativa¨, expresaba: La extensa producción y en muchos casos superposición de disposiciones y normas en los distintos niveles, europeos, estatales, autonómicos y locales, genera un entramado legislativo, que hace muy dificil la actividad de ciudadanos y empresarios. ¿El tener y soportar tanta ley, normas, procedimientos…favorece la sostenibilidad de la economía?

Finalizo con otra reflexión. Estos días estamos viendo y oyendo, que tal o cual banco está en situación de crisis o quiebra. Han caído tres bancos estadounidenses y uno europeo. Podemos leer y escuchar múltiples, diversas y diferentes opiniones. Pero…tanto en la forma como en el fondo, ¿Si estas entidades hubieran estado gestionadas de la forma tradicional y convencional bancaria, y sobre todo de forma sostenible, hubieran llegado a éstas situaciones? 

Ahhh... y otra reflexión ¿Hay alguna cuestión más #insostenible que el actual sistema español de #pensiones? ¡Pero eso es otra historia!

Miguel Angel OTIN LLORO


miércoles, 8 de marzo de 2023

Mujer y finanzas

 


MUJER Y FINANZAS 

¿Recuerdan en que año la mujer dejó de ser dependiente de su marido para abrir una cuenta bancaria? En 1978, año de la aprobación de Constitución Española. Gracias a la citada Constitución, las mujeres empezaron a ser libres, no sólo para la apertura de una cuenta bancaria, también para administrar los bienes comunes, o incluso para hacerse el DNI.  

Estamos en la semana (oficial) de la mujer, y en mi opinión, afortunadamente la mujer se ha integrado en el mundo financiero. No solamente como empleadas (salvo error por mi parte la primera mujer que entró a trabajar en un Banco en Huesca, fue en el Hispano Americano y debió ser hace 50 años). Su capacidad les ha permitido promocionar a puestos directivas y en general disponen de buena cultura y educación financiera.

Pero…estas sensaciones voy a intentar cuantificarlas. Hace unos días tuve conocimiento y acceso a un informe de la compañía Mastercard, denominado ¨Mujer y Finanzas¨. Han investigado en doce países europeos y elaborado un interesante estudio sobre la relación de las mujeres con el dinero, así como su evolución financiera.

Según el citado estudio o informe, una de las principales conclusiones determina que las mujeres quieren ser financieramente independientes. Siete de cada diez españolas encuestadas (74%) consideran que es un objetivo prioritario en su vida, en línea con la media europea (70%) y solo por debajo de Portugal (84%) y Rumanía (76%). 

El 75% de las españolas piensan que son autosuficientes a nivel económico. De ellas, el 89% lo atribuye al hecho de que ganan su propio dinero y no tienen que depender de nadie o porque tienen ahorrada una cantidad para afrontar cualquier problema financiero.

En consecuencia (me referiré en todo momento al mentado estudio), el 25% de las españolas encuestadas dicen no sentirse financieramente independientes porque necesitan el apoyo económico de otra persona. De ellas el 66%, creen que nunca conseguirán su independencia financiera, por encima de la media europea (64%). Es significativo, la edad. A mayor edad, menos expectativas de conseguirlo.

A resaltar, que el estudio pone de relieve que la tendencia en España es positiva, puesto que un 74% del total de las encuestadas afirma ser más independiente económicamente que las mujeres de anteriores generaciones de su familia, por encima de la media europea (67%). Mientras, un 19% de las españolas considera que tiene el mismo nivel de independencia que sus antecesoras y solo el 7% dice tener menos.

Una conclusión significativa, que la brecha de género sigue abierta. El estudio pone de manifiesto que sigue sin cerrarse, dado que el 55% de las españolas consideran que las mujeres son todavía menos independientes económicamente que los hombres, por encima incluso de la media europea (50%). La mayoría de las españolas asegura que esto se debe a que las mujeres asumen trabajos no remunerados (71%). Otra clasificación determina que al cobrar menos que los hombres (54%), o por decidir ser madres a tiempo completo y abandonar su carrera profesional (35%), e incluso por optar a depender económicamente de otra persona (11%).

Analizando la evolución de la economía familiar, en el apartado de cómo se repartían los gastos en la unidad familiar en la que crecieron, las mujeres españolas (independientemente de su edad) concretamente el 56%, coinciden en que el padre asumía la mayor parte de los gastos. Sin embargo, esta tendencia se va reduciendo con el paso del tiempo.

Respecto a los hábitos de ahorro y gasto de las españolas, el estudio analiza en lo que el dinero supone para las españolas y en qué lo gastan. Para la mayoría (un 54%) significa mayor libertad. En segundo lugar, supone una menor presión para hacer frente a deudas y o inversiones (26%) y por último poder ahorrar para el futuro (20%). Un aspecto que me ha llamado la atención que el 71% de las encuestadas, después de la pandemia prefiere gastar o invertir su dinero en experiencias y emociones, frente al 29% que optaría por productos o bienes materiales.

Un aspecto para mejorar, pese al progreso de su independencia económica es lo que respecta a los conocimientos financieros. El 70% de las mujeres entrevistadas en España dice tener ninguno o muy primarios, en concreto el 58% asegura tener conocimientos básicos y un 12% un nulo conocimiento.

Mastercard, analiza la importancia que tiene para las mujeres la tecnología en el manejo de su economía. Para el 70% de españolas juega un papel importante o esencial, mientras que un 30 % comenta que no suele depender de la tecnología para gestionar sus finanzas, en línea con el resto de los países del estudio. En cuanto a las herramientas más útiles en su gestión de finanzas, un 50% de las mujeres españolas consideran la banca online como la más práctica.

A modo de resumen, de este estudio (muy completo en datos y conclusiones), básicamente puede determinarse que las mujeres de hoy, aunque creen que les va mucho mejor que a sus generaciones anteriores, desean una mayor independencia financiera, pero todavía tienen progresos que hacer y barreras que superar. ¿Alguien duda de su capacidad, para conseguirlo? ¿Necesitan ayuda para obtenerlo? Personalmente considero que no necesitan de ¨progresistas¨ que por ley exigen que haya reglas de paridad. ¡Pero eso es otra historia!


Miguel Angel OTIN LLORO