Humanismo y tecnología

HUMANISMO Y TECNOLOGÍA 

Cómo estamos a principios de año, comparto una reflexión que me ha encantado: ¨El problema de Año Nuevo es que las personas piden deseos en lugar de ponerse objetivos, hay mucha diferencia entre esperar que las cosas sucedan y trabajar por hacerlas realidad¨. (Desconozco el autor)

 

Pero vamos al grano. Me llamó la atención la noticia de que el Ministerio de Asuntos Economía y Transformación Digital, dedica 600.000 euros de los fondos de la Unión Europea (a través de Red.es), a promover el "humanismo tecnológico¨ en la sociedad. Se pretende adaptar la tecnología a la vida y derechos de las personas.

 

Al efecto observo se están implantando e implementado medidas, como la comentada de educación, sensibilización y publicidad por parte del Ministerio de Economía. El Gobierno defiende que la digitalización es una de las prioridades de los fondos europeos, representando cerca del 33% de las inversiones previstas en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, que movilizará cerca de 72.000 millones de euros, gracias al instrumento Next Generation EU.

Economía asegura que ¨para acelerar la transformación digital de la economía y la sociedad, proporcionando un clima favorable a la inversión y al refuerzo del tamaño de las empresas para aumentar la productividad y competitividad de toda la economía a través de tecnologías digitales disruptivas (como la Inteligencia Artificial), se hace necesario impulsar una digitalización humanista, que ponga en el centro a las personas, y se alinee con una Carta de Derechos Digitales acordada a nivel nacional, europeo y global¨. Y también, poniendo el foco en la sostenibilidad y el medio ambiente. 

Y otras iniciativas, como el Foro de Humanismo Tecnológico, creado por Esade, espacio de reflexión y debate sobre el impacto de la tecnología en la vida y los derechos de las personas, desde las perspectivas empresarial, política y social. Expertos de prestigio, académicos, investigadores y figuras relevantes comparten sus pensamientos, teorías y conocimientos en torno a diferentes temáticas, siempre desde una perspectiva humanista.

¨El futuro es tecnológicamente más humano¨, proclama Marc Vidal (consultor e inversor tecnológico y divulgador económico). Así lo exponía en un reciente Foro ¨La educación que viene: más digital y personalizada, organizado por EL MUNDO y la Fundación Telefónica. Interesante el comentario, que cuando le preguntan algunos padres, qué carrera tienen que estudiar sus hijos para encontrar trabajo, ¨allá por 2040¨, siempre recomienda que aprendan Filosofía y lean a Dylan Thomas.

La buena tecnología, es poner los cambios al servicio del bien común, mitigando todos los riesgos posibles. Uno de los retos que la sociedad tiene que afrontar tras la pandemia, es corregir las desigualdades educativas, sociales y tecnológicas. Iñaki Ortega y José María de la Torre, han editado un libro con esté titulo y temática.

Considero reincidir y prestar atención (ya lo expuse en artículo anterior) a la Tecnología Inclusiva. Aquella que busca facilitar y dar herramientas para la autonomía y la comunicación de personas con discapacidad. La necesidad del desarrollo de tecnologías que ayuden a personas con cualquier tipo de dificultad en sus capacidades físicas o mentales, se ha extendido en los últimos años y son muchas las iniciativas al respecto. Tratan de favorecer la participación en la sociedad y ofrecer herramientas para la comunicación y autonomía de estas personas. No olvidemos que el 10% de las personas, son personas con otras capacidades. ¡Esto también es humanidad!

Según Antonio Luis Terrones, los importantes y profundos avances que está experimentado la tecnología, y ante los desafíos y retos tecnológicos, nos sitúan frente a un escenario novedoso para la humanidad, que demanda una nueva concepción del humanismo, y más en concreto el humanismo tecnológico. Los rápidos avances en el campo de la inteligencia artificial (IA) ponen de relieve la necesidad de incorporar criterios éticos de responsabilidad. Esa incorporación permitirá el planteamiento de un nuevo concepto, una inteligencia artificial responsable (IAR).

La humanidad confía en la tecnología cómo solución a sus problemas (y males), y en ciertos ámbitos (tecnología y pensamiento y tecnología y ética) se está debatiendo sobre si la tecnología, se debe desarrollar con mentalidad y voluntad liberal o con intervencionismo. ¿Dejamos hacer a la inteligencia artificial que siga su evolución natural, o se debe controlar e intervenir? ¿Ponemos puertas al campo?

Miguel Angel OTIN LLORO